Los restos del helicóptero que el pasado 23 de abril se desplomó sobre el kilómetro 19 de la carretera a Laredo, en Apodaca, permanecen todavía en el lugar junto a unas veladoras en honor al piloto fallecido.
En una visita realizada por ABC Noticias al lugar de los hechos, se constató que la zona sigue acordonada con cinta amarilla e incluso se puede observar parte de la malla caída, así como cables rotos, el motor de la aeronave y una parte de la aleta.
Cerca de los restos calcinados fueron colocadas siete veladoras en memoria de Francisco Elvira, quien pilotaba la aeronave.
Para esclarecer la causa del accidente, autoridades estatales abrieron una carpeta de investigación, sin embargo, a la fecha no existe una versión oficial que pueda aclarar la razón exacta del accidente aéreo.
El helicóptero salió del Aeropuerto del Norte y se dirigía a un helipuerto privado en Monterrey, sin embargo, no logró llegar y finalmente cayó y se incendió.