Una niña de 12 años que permanecía secuestrada en una casa en Estados Unidos logró escapar gracias a que mordió sus ataduras y consiguió que su captor fuera detenido, informó la prensa local.
La menor, cuya identidad no fue revelada, fue descubierta caminando por una carretera rural en Alabama.
Un automovilista que conducía por la zona se detuvo para ofrecerle ayuda y después llamó al 911.
Tras relatar su historia, las autoridades iniciaron una investigación y detuvieron a José Paulino Pascual-Reyes, de 37 años, acusado de secuestro y con más cargos pendientes.