Pocos hitos son más difíciles de conseguir que un bicampeonato de la NFL. A lo largo de la historia de la liga, sólo siete organizaciones han conseguido grabar su nombre en el trofeo Vince Lombardi en años consecutivos, siendo los Patriotas de Nueva Inglaterra de 2004 el más reciente equipo en lograrlo.
Bajo las luces de Hollywood, pero con las probabilidades en su contra, los Carneros inician esta noche la defensa de su campeonato contra el rival más difícil: los Bills de Buffalo, quienes son los favoritos en las casas de apuestas para conquistar el próximo Super Bowl.
Los Carneros mantuvieron el 80 por ciento de los 22 titulares que ganaron el campeonato pasado. La marcha de Von Miller es el golpe más duro para este equipo que además deberá afrontar el calendario más complicado de acuerdo al récord del año pasado que obtuvieron sus rivales. Buffalo es un formidable oponente de apertura de temporada para Los Ángeles. Sin embargo, si hay un equipo que puede frenar el curso son los Carneros, por algo son los actuales campeones de la NFL.
Con la medicina oriental, las terapias alternativas, una dieta rica en proteínas a base de plantas, helados de aguacate y un montón de recomendaciones que adopta de su gurú Alex Guerrero, a sus 45 años de edad, Tom Brady luce con el cuerpo de un dios griego y no como el adulto que afronta la recta final de su vida reproductiva con una receta de viagra en la bolsa trasera del pantalón.
El quarterback más ganador en la era del Super Bowl ha conseguido extender su carrera como nunca antes ningún ser humano logró dentro de la NFL. No sólo se trata de retar al padre tiempo sino también de competir.
A sus 45 años de edad, si nada extraordinario sucede, Brady se convertirá en el primer jugador con 10,000 yardas por aire. Acumula 84,520 en temporada y 13,045 en playoffs. Utilizando matemáticas básicas, TB12 necesita 2,431 yardas por pase para un nuevo baño de confeti.
Brady posee la mayor cantidad de victorias para cualquier quarterback con 243 y puede ser el primero en tomar los 250 triunfos. Está a tres de sumar 50 en postemporada, otro de los número que ningún otro jugador ha logrado.
49ERS Y CARDENALES HACEN UN VIAJE AL SUR
Con el mundo sumergido en la nueva normalidad tras el confinamiento provocado por la extensa pandemia del coronavirus, la NFL volverá a cruzar el sur del río Bravo para celebrar un partido en la capital del país.
El quinto partido en la historia de la liga en nuestro país será una reedición del primero: 49ers enfrentando a los Cardenales en el Estadio Azteca.
En 2005, los equipos jugaron con una asistencia de 103,467 fanáticos, la octava multitud más grande en la historia de la NFL.
La rivalidad del Oeste de la Conferencia Nacional, se llevará a cabo el 21 de noviembre y contará con dos de los 12 quarterbacks titulares que habrá este año: Trey Lance y Kyler Murray.
Como parte de la nueva iniciativa del área internacional de mercadeo local de la NFL, los 49ers y los Cardenales recibieron derechos comerciales en México al menos hasta la temporada 2026. Debido a las remodelaciones a las que será sometido el Azteca para albergar el Mundial de Futbol 2026, no está garantizado que la NFL regrese en 2023.
LOS BILLS SON LOS GRANDES FAVORITOS
Los Bills inician el año con grandes expectativas, pero sobre todo con las piezas que necesitan para lograr metas elevadas. Los números alentadores no son algo familiar para esta organización que tiene una fuerte conexión con las tragedias. Sin embargo, los Bills quieren capturar sus fantasmas y regresar a un Super Bowl después de casi 30 años de ausencia. Tienen cuatro apariciones en postemporada en las más recientes cinco campañas. Jugar playoffs ya no significa mucho.
Buffalo cuenta con Josh Allen como el principal candidato al MVP de la temporada. Sin embargo, la ofensiva de los Bills podría ni siquiera ser su punto más fuerte. Los Bills contrataron a Von Miller para apuntalar su defensa. Son favoritos en las apuestas para ganar le juego más grande que tiene la NFL: el Super Bowl LVII.