“Ropo pompón, ropo pompón”… prácticamente cualquiera puede reconocer ese sonido, pero pocos con el ritmo de Juanes y Jay de la Cueva.
En esta temporada, algunos músicos han optado por rescatar temas que pertenecen al imaginario colectivo, aunque esto no es algo nuevo: esta canción, que conocemos como El Niño del Tambor, se remonta a un origen checo y se ha versionado miles de veces desde que la pianista estadunidense Katherine Kennicott Davis lo adaptó al inglés en 1941, e incluso Frank Sinatra la interpretó.
El Universal hizo un recuento de los temas navideños nuevos que más gente escucha en estas fechas, algunos son covers y otros originales.
“Creo que los que se animan a crear una nueva canción tienen una competencia en cuanto a la tradición, porque la mayoría graba canciones que ya se conocen y aspiran a recibir algo que ya está más constituido, porque uno va al súper, en la calle, en donde sea, y se escuchan las mismas canciones. Es como un playlist que ya se repite para siempre”, dice en entrevista Pável Granados, director de la Fonoteca Nacional.
No importa si es rock, pop, balada, cualquier género será exitoso y bien recibido porque, dice Granados, son temas que se encuentran y se almacenan en la memoria.
“Es un repertorio con el que uno crece. Música que solamente se escucha en diciembre y que, si la gente la pone en otra época del año, es extraño”.
El género ha variado. En los años 60 se hicieron cumbias en Navidad; en los 70, baladas: “Hasta llegaron a hacer boleros de la Navidad que interpretaban Los Panchos, también canciones rancheras por ejemplo está la Amarga Navidad de José Alfredo Jiménez”, explica.