Este martes por la noche, Meghan Markle y el príncipe Harry fueron los invitados de honor en la gala de los premios Ripple of Hope celebrada en Nueva York, donde recibieron un galardón otorgado por la Fundación RFK en reconocimiento a su lucha contra el racismo institucional en el seno de la monarquía británica.
Cuando se anunció que Harry y Meghan sería premiados por su labor humanitaria con este reconocimiento, Kerry Kennedy -hija de Robert F. Kennedy y actual directora de la fundación- aseguró en una entrevista con el periodista Gustavo Egusquiza que ambos reúnen méritos más que suficientes para merecerlo porque se han atrevido a cuestionar a su círculo de allegados y a su familia en defensa de lo que saben que es lo correcto.
El matrimonio apareció muy sonriente en la alfombra y tomados de la mano para aceptar este reconocimiento, que agradecieron por medio de un discurso grabado en el que se comprometieron a seguir trabajando para derribar «las barreras más altas de la discriminación y la opresión».
Su aparición pública causó un revuelo mayor de lo habitual porque en cuestión de dos días se estrenará su documental para Netflix, que se espera que haga temblar de nuevo los cimientos de palacio por lo que ellos tengan que decir acerca del trato que recibieron tras su boda.