Austria mantendrá hasta el 6 de enero un toque de queda nocturno y el cierre los locales de gastronomía y hoteles, aunque comenzará a relajar el próximo lunes otras restricciones, con la vuelta de parte de los alumnos a los colegios y la apertura del comercio bajo estrictas medidas sanitarias.
Los cines y teatros seguirán cerrados, pero desde el próximo lunes abrirán los museos y las bibliotecas, se podrá volver a practicar deporte de forma individual al aire libre a partir del 24 de diciembre.
Aunque el turismo de invierno se verá afectado por el cierre de hoteles, las pistas de esquí y de patinaje podrán funcionar en todo el país.
Para las festividades de Nochebuena y Nochevieja, el Gobierno ha autorizado reuniones de hasta diez personas, niños incluidos, y levantará el toque de queda nocturno (entre las 20.00 y las 06.00) y desde el lunes se permite que se reúnan los miembros de dos grupos de personas que vivan juntas.
Los niños que van a las guarderías y cursan la educación primaria y secundaria hasta catorce años podrán volver a las clases presenciales, mientras que los mayores de esa edad, hasta la Universidad, seguirán con el sistema remoto.
Sólo quienes se examinan de selectividad este curso podrán volver a las aulas.
Los tradicionales mercados de Navidad no podrán abrir este año.
Kurz aseguró el confinamiento en el que el país se encuentra desde hace dos semanas, con los centros educativos, la gastronomía, el ocio y el comercio no esencial cerrado, ha tenido su efecto positivo en la caída del número de contagios, y que eso es lo que permite una apertura gradual, si bien de forma «cautelosa».
«La pandemia no ha pasado, el virus sigue entre nosotros y las cifras de contagio son aún extremadamente altas», señaló el canciller.
Kurz confió en que en el verano se vuelva a una situación de normalidad, pero insistió en que, hasta entonces, la única forma de evitar que se disparen los contagios es mediante restricciones y test generalizados y frecuentes.
«La cifras a la baja son un éxito, pero no un motivo para retirar la alarma», señaló.
El Gobierno ha anunciado también que quienes regresen a Austria de países con altos niveles de contagio deberán someterse a una uarentena, algo que afecta especialmente a los países vecinos, adonde viajan durante las Navidades muchos austríacos o residentes de origen extranjero para visitar a las familias.
Austria ha logrado reducir en las últimas semanas de 600 a 250 la incidencia de contagios acumulados en una semana por cada 100 mil habitantes.
En las últimas 24 horas se han registrado 3 mil 972 nuevos casos de la Covid-19, un 30 % menos que hace una semana.
