Cada año en México se presentan 170 mil casos de infarto cerebral al año, con lo que es ya la segunda causa de discapacidad en el país y de suma importancia conocer los síntomas y actuar oportunamente, señaló un experto.
“Es una enfermedad cada vez más común. Lamentablemente hoy es la segunda causa de discapacidad y la cuarta causa de muerte a nivel mundial”, dijo a EFE, Daniel Sánchez Arreola, miembro de la Mesa Directiva de la Sociedad Mexicana de Medicina de Emergencia (SMME).
En el marco del Día Mundial del Infarto Cerebral que se conmemora el 29 de octubre, el especialista explicó que el infarto cerebral, también conocido como embolia o derrame cerebral, es una alteración neurológica que se caracteriza por su aparición repentina, causando secuelas y muerte.
Sin embargo, el problema es que hasta 85 por ciento de las veces, las personas que lo sufren no sienten ningún dolor. Es por eso que a menudo se ignoran los síntomas y no reaccionan rápidamente para pedir ayuda.
“Es por eso que solo el 37 por ciento de los mexicanos sabe reaccionar ante un infarto cerebral”, lamentó Sánchez Arreola, quien precisó que durante un infarto cerebral, cada minuto se destruyen 1.9 millones de neuronas.
En comparación con la tasa normal de pérdida de células en el envejecimiento del cerebro, el cerebro envejece 3.6 años por cada hora que pasa sin recibir tratamiento.
“Cuanto antes reciba atención médica el paciente, mayores serán sus posibilidades de una recuperación exitosa”, acotó.
Sin embargo, el desconocimiento de los síntomas y la atención a destiempo, produce que cuatro de cada 10 pacientes mueran, y el resto quede con alguna secuela.



