«La muerte. Lo único que le pido es que no me vaya preparando, que me agarre de un día para otro. No quiero sufrirla”. Tales palabras, que datan de 2019, son del comediante, actor, cantante, compositor e imitador mexicano Benito Castro, quien, como lo expresó entonces, falleció ayer a los 77 años, y cumplió el deseo revelado en aquel mismo discurso: “Mi deseo por cumplir es irme en paz, dejando afectos, amigos, y no dejando enemigos, ni resentimientos o cosas tristes. Irme en paz con Dios, con la vida y conmigo mismo”.
Tras un accidente doméstico en el que sufrió una caída de las escaleras, que le dejó las costillas rotas y, a consecuencia, un pulmón perforado y una contusión en la cabeza, Arturo Benito Castro Hernández, su nombre real, murió ayer a la una de la tarde en un hospital en la colonia Roma, en la Ciudad de México, y la noticia fue confirmada por sus familiares.
«Es la mayor pérdida de mi vida. Gracias por el cariño a mi papá, siempre fueron muy lindos y atentos con él. Yo estuve con él todo el tiempo, antes de que (muriera), lo iban a subir a una operación y pude pasar y hablar con él. Me siento tranquila, porque pude estar con él. Estoy confundida, no quiero decir que enojada por cómo pasan las cosas, pero muy confundida, porque él estaba perfecto y ¡este accidente! Ya iba saliendo a trabajar, no sé qué decir”, señaló su hija.
«Se cayó. Hoy (ayer) en la mañana iba a Televisa y ya iba saliendo, porque venía rasuradito y traía su mochila y otras cosas cargando. La escalera está empinada, horrible, perdió el equilibrio y no hay de dónde agarrarte. Tenía que estar en Televisa a las 08:00 horas. Él les habla, todavía, a Paty, la muchacha, y a Debby, su hija. Debby estaba dejando al niño en la escuela y no oyó el teléfono, pero inmediatamente vio la llamada perdida, se la regresa y le dice lo que pasó. Pidieron la ambulancia y casi llegaron al mismo tiempo. Lo trajeron al hospital.