La subvariante BA.5 de Ómicron representó el 77.9% de los casos de coronavirus en Estados Unidos en la semana que terminó el 16 de julio, informaron el martes los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos.
BA.5, que ha demostrado ser especialmente bueno para evadir la protección inmunitaria que ofrece la vacunación o la infección previa, ha estado impulsando un aumento de las nuevas infecciones en todo el mundo.
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La subvariante BA.4 constituyó el 12.8% de los casos en Estados Unidos, según los datos.
El regulador sanitario estadounidense ha pedido a los fabricantes de vacunas que apunten a esas variantes para una posible dosis de refuerzo en la temporada de otoño boreal.
Las autoridades sanitarias estadounidenses también están instando a las personas de 50 años o más a que reciban la vacuna de refuerzo, añadiendo que hacerlo no les impediría recibir otro refuerzo «bivalente» diseñado para defenderse de ómicron de forma más específica este mismo año.
La ciudad de Shanghái también descubrió un caso de covid-19 relacionado con BA.5, declaró un funcionario en una reunión informativa la semana pasada, lo que aumentó la alarma mundial por la propagación de la variante.
Casa Blanca dará prioridad a refuerzos vacunas, pruebas para combatir subvariante Ómicron.