Más de mil aficionados se reunieron en una ceremonia religiosa que se realizó en el estacionamiento del Estadio Jalisco para honrar a los aficionados heridos durante la trifulca, exigiendo justicia y cese a la violencia tras la bronca que se dio en el partido entre Querétaro y Atlas en el Corregidora.
Durante la misa las rivalidades deportivas quedaron de lado y se observaron por igual playeras de clubes como Chivas, Tigres, Leones Negros, América, Pachuca, Pumas y Cruz Azul, quienes manifestaron su repudio a la violencia generada en La Corregidora.
Desde aplausos a los sobrevivientes que estaban presentes hasta otro momento emotivo, el padre que ofició la misa pidió a los aficionados de los diferentes equipos que pasaran al frente para abrazarse y cantar juntos el Padre Nuestro.