El hombre acusado de haber querido disparar a Donald Trump en Florida, Ryan Routh, se declaró este lunes ante la justicia estadounidense no culpable de intentar asesinar a un candidato presidencial.
«Nos declaramos no culpables» de todos los cargos, dijo su abogada, Kristy Militello, durante una audiencia que duró apenas unos minutos en el tribunal federal de West Palm Beach, en Florida (sureste).
Routh, de 58 años, fue detenido el 15 de septiembre, poco después de su presunto intento de asesinato en un campo de golf donde jugaba el expresidente Trump.
Un gran jurado -una comisión de ciudadanos investidos de poderes de investigación- le imputó el martes en Miami los cargos de «intento de asesinato de un candidato presidencial», «posesión de un arma de fuego para cometer un delito violento» y «asalto a un oficial federal».