Con motivo de los cambios de temperatura que ocasionan enfermedades respiratorias en la época de frío, la Secretaría de Salud recomienda extremar los cuidados y medidas preventivas para preservar la salud.
La Subdirección de Epidemiología informa que los padecimientos más frecuentes son casos de resfrío, neumonía, crisis asmáticas, bronquiolitis, otitis y amigdalitis, entre otros.
Por lo anterior, es importante considerar las medidas preventivas de higiene personal y saneamiento como el lavado de manos de modo frecuente, ante el estornudo cubrir la nariz y boca con el antebrazo, no tocarse la cara, así como la limpieza y desinfección de superficies y objetos de uso común.
También debe evitarse la exposición a los cambios repentinos de temperatura y las corrientes de aire; al salir cubrir boca y nariz para evitar aspirar el aire frío, por lo cual se recomienda abrigarse adecuadamente y no permanecer en la intemperie cuando haya bajas temperaturas, con mayor énfasis las personas vulnerables como adultos mayores, niños y niñas.
Es conveniente incluir en la dieta, frutas y verduras con vitaminas C y D, pescado y leche, así como el consumo de líquidos de forma abundante.
Otra de las acciones importantes es aplicarse la vacuna contra la influenza, particularmente los menores de 6 a 59 meses, los adultos de 60 años y más, las embarazadas y quienes tengan diabetes, obesidad, padecimientos respiratorios o del corazón, entre otras enfermedades crónicas.
En caso de presentar síntomas como fiebre, respiración variable, infección de garganta o de las vías respiratorias, acudir a la unidad de salud más cercana para una atención médica oportuna, por lo que es primordial no auto medicarse porque se ocultan los síntomas y esto puede agravar la situación.
La Secretaría de Salud reitera el compromiso de trabajar por el bienestar en la población y exhorta a la sociedad a seguir estas medidas para preservar la salud.