Pese al dolor por problemas en la zona abdominal, Rafael Nadal pudo clasificarse este miércoles a las semifinales de Wimbledon, donde se enfrentará el viernes al australiano Nick Kyrgios, que poco antes había cortado en seco la aventura del chileno Cristian Garín.
Para Nadal, el partido de cuartos ante el estadunidense Taylor Fritz (14º del mundo) fue convirtiéndose en un calvario que el mallorquín, cuarto del ránking ATP, recorrió de manera épica, hasta una victoria final en el ‘super tie-break’ del quinto set, por 3-6, 7-5, 3-6, 7-5 y 7-6 (10/4).
«El cuerpo, en general, va bien, pero tengo algo en la zona abdominal. He tenido que encontrar una manera de sacar de manera diferente. En varias ocasiones pensé que no terminaría el partido, pero el público, con la energía que me envió, me permitió llegar al final», explicó.


