La Subsecretaría de Educación Media Superior y Superior de la Secretaría de Educación y Deporte (SEyD), con el apoyo del Tecnológico de Monterrey a través de la Iniciativa de Educación con Equidad y Calidad de la Escuela de Gobierno y Transformación Pública, desarrolló la propuesta de política educativa ante el reto de la vinculación entre el sector educativo y el mundo del trabajo en Chihuahua.
En el documento titulado “Desarrollo de un Modelo de Talento Humano en el estado de Chihuahua” se señala que uno de los temas asociados a la calidad y pertinencia de la educación es el aseguramiento de que todas y todos los jóvenes mexicanos además de desarrollarse para ser ciudadanos responsables e informados, tengan las competencias para participar en el mundo del trabajo, que es cambiante y diverso.
Para la integración de la propuesta de política educativa se abordaron tres aspectos: el primero, resume el análisis de la información del sistema educativo en el estado, retomando elementos de la educación media superior y de la educación superior.
El segundo, se deriva de entrevistas para reconocer las experiencias y preocupaciones de representantes del sector productivo del estado de Chihuahua, para identificar aquello que consideran es urgente para una efectiva vinculación entre educación y trabajo.
Y el tercero, comprende el resultado de entrevistas a directivas y directivos de instituciones educativas de bachillerato y educación superior, para reflexionar sobre algunas brechas en el desarrollo de competencias de estudiantes que se incorporan al mundo del trabajo al concluir sus estudios, así como para analizar mecanismos de mejora y transformación tendiente a cerrar dichas brechas.
La subsecretaria de Educación Media Superior y Superior, Liliana Rojero Luevano, informó que la investigación realizada por personal de la institución a su cargo, con el apoyo del Tecnológico de Monterrey, incluye dentro de sus propuestas el incentivar a más niñas a cursar programas de matemáticas, ciencias, tecnología e ingeniería, además de la relevancia de impulsar aprendizajes y competencias interpersonales y de liderazgo.
Otro aspecto es el estructurar mecanismos sistemáticos de vinculación y colaboración entre los sectores educativo y productivo, y la pertinencia de una estrategia de formación continua docente que incluya los aspectos de impulso al desarrollo de habilidades blandas.