Pedro Almodóvar hizo ayer historia al ganar el León de Oro de la 81 Mostra de Venecia con su primer largometraje en inglés, La habitación de al lado, una película sobre la eutanasia, un “derecho fundamental”, proclamó el director español.
Almodóvar realizó esa defensa al derecho a morir dignamente en una ceremonia que tuvo su momento dramático al anunciarse el premio a la Mejor Actriz, para la estrella Nicole Kidman por Babygirl.
Kidman no pudo recoger el galardón porque se enteró de la muerte de su madre justo al llegar a Venecia.
“A mi llegada a Venecia me enteré de la muerte de mi madre, Janelle Kidman. Estoy conmocionada y debo reunirme con mi familia. Este premio es para ella”, leyó con emoción la directora de la película, Halina Reijn.