El mexicano Raúl Jiménez abrió la victoria del Wolverhampton Wanderers contra el Tottenham Hotspur (0-2) que ha perdido sus dos últimos partidos en casa en cinco días.
El delantero azteca solo necesitó seis minutos para herir la endeble defensa de los Spurs, que venía muy tocada tras lo ocurrido el miércoles contra el Southampton. No funciona en el equipo de Antonio Conte ni Hugo Lloris, que hizo dos muy malos despejes y la pelota terminó en Jiménez, que la embolsó con el pecho y la mandó a la red con una perfecta volea.
El mexicano celebró su quinto tanto en esta Premier League y el segundo en los últimos cuatro partidos, acercándose poco a poco a los registros que promediaba antes la grave lesión en el cráneo que sufrió en noviembre de 2020.