El Ejército israelí ordenó la evacuación total de la ciudad de Gaza, en el norte del enclave, después de varias jornadas de avisos parciales a barrios concretos que permitieron a las tropas avanzar hacia las áreas occidentales de la capital.
Con panfletos lanzados desde el cielo en los que advirtieron que “Gaza continuará siendo una peligrosa zona de combate”, las fuerzas armadas llamaron a los civiles a “desplazarse rápidamente” a la ciudad de Deir al Balah, centro de la Franja, y al cercano pueblo de Zawayda.