El líder supremo iraní, el ayatolá Ali Jamenei, afirmó este miércoles que su país no tendrá piedad con el poder israelí, horas después de que el presidente norteamericano Donald Trump pidiera la «rendición incondicional» de Teherán.
Por otra parte, el líder iraní ofreció este miércoles por la madrugada un discurso televisivo y señaló que su país no se rendirá, en el sexto día de confrontación abierta con Israel, y lanzó un mensaje de advertencia a Estados Unidos.
«La nación iraní se opone firmemente a una guerra impuesta, como se opondrá firmemente a una paz impuesta. Esta nación nunca se rendirá a los dictados de nadie», afirmó Jamenei en un discurso televisado. Igualmente, agregó, «los norteamericanos deben saber que cualquier intervención militar por su parte implicará daños irreparables».
