Alexander Zverev no pudo terminar el partidazo que tenía con Rafael Nadal, debido a que se lesionó el tobillo y tuvo que retirarse cuando el duelo llevaba más de tres horas de juego, en el segundo set. Ante ello, el español avanza a la final de Roland Garros. La pizarra quedó 7-6 (10-8) y 6-6.
Rafa Nadal estaba abajo en el primer set, pero le dio la vuelta con un servicio ace, aunado a un error en la devolución de Zverev para irse al frente por 5-4.
El alemán no bajó los brazos, subió a la red y dio una gran dejada para igualar 5-5 con 58 minutos de partido.
Venía lo mejor. El español se puso 6-5 y dio una “maestría” de golpes y devoluciones. En el sexto set point le arrebató el primero a su rival en una hora y 31 minutos de partido.
Con tres horas de partido, un 6-6, Zverev pasó un momento complicado. Se le trabó el pie derecho y se le dobló el tobillo, provocando grandes gestos de dolor y sacándole las lágrimas. Salió de la pista en silla de ruedas, donde el público lo despidió con aplausos.
Tras ser atendido, Zeverev salió a la pista con muletas, fue vitoreado.