La videoconferencia es perfecta en su recepción, imagen y voz nos expresan con enorme claridad la perspectiva académica del intelectual y docente de la Universidad de prestigio fundada por los jesuitas y radicada en la imponente Ciudad de México, la Teoría política y la Historia del pensamiento filosófico se dejan notar con la luminosidad de un profesional que dedica largo tiempo de su vida a explicar las motivaciones inmediatas y profundas del comportamiento político, he aquí parte de su cátedra magistral ”…El Manual del populismo se va cumpliendo a cabalidad en el podrido ambiente del estado de Chihuahua, bueno, en México entero con las especificidades del caso. Como es sabido, el populismo trasciende, supera cualquier posible clasificación tradicional en “izquierdas o derechas” de las viejas geometrías políticas, es un “mazacote” que jala todo aquello que le represente un crecimiento cuantitativo de sus mayorías facciosas.
En este sentido, en Chihuahua observamos de manera absolutamente nítida la agonía o muerte del esquema político de partidos y entramos de lleno en la política de las facciones, precisamente lo que el populista que despacha en Palacio Nacional quería como premisa de Manual, es decir, estructurar dos bloques antagónicos y homogéneos, cosa que AMLO viene construyendo de manera especialmente intensa desde el momento que se transformó su populismo opositor y se viene constituyendo su populismo como gobierno…”
“…AMLO se mueve con toda facilidad en un ambiente de estructuras institucionales reblandecidas y degradadas, es un líder popular no enganchado a la estructura de un partido, incluso ese andamiaje “plástico” de organización ideológicamente ficticia que es MoReNa lo ha desinhibido y predispuesto a emplear tal gigantesco andamiaje para cortejar a una audiencia y un electorado que, no solo es más amplia que los miembros de un partido, como ocurre en la democracia electoral, sino que también es de algún modo “apartidista”, en el sentido de que es capaz de catalizar diversos intereses e ideas bajo la figura del líder popular. Además, AMLO se mueve más en armonía con la metáfora del Teatro, es decir, la representación escenificada, que con la metáfora del Parlamento, esto es, de la asamblea discursiva, esto le da gran empuje y atractivo a su versión populista…”
“…Al parecer su apuesta histórica avanza con su categoría manejada hasta el hartazgo del PRIANRD, en el caso concreto de Chihuahua esto es ya clarísimo, tanto que parece que la historia política del estado juega a favor de los simplismos populistas autoritarios del tabasqueño hoy en el poder federal. “Los buenos contra los malos”, el pueblo bueno y sabio en contra de los conservadores, precisamente, el ataque del populismo contra “los enemigos del pueblo”, responde al supuesto conceptual populista “light” de que los dos grupos que se expresan en las elecciones son homogéneos y mutuamente excluyentes.
Por una parte está el grupo de los “incorruptibles” y, por otra el de los “conservadores”, la ya no tan manoseada discursivamente por AMLO “mafia del poder”. En Chihuahua este tablero del Manual del populista, parece evidentemente sin serlo en la determinación de la realidad, una rara especie de profecía, así vemos hoy a los esperpentos de lo que queda de los partidos del PAN y del PRI, mas estos espectritos del RSP y FxM, configurando la infumable constelación del “bloque homogéneo conservador”, agregando el detallazo de ser representados por la muy popular y poco decente políticamente “Maru” Campos; ya están en donde el populista los quería, en la simplona y perversa metáfora de la BOA, precisamente a donde los condujo sus sustancia histórica en demolición y la “varita” del flautista de Macuspana…”
“…La política populista es excluyente, sabemos que el populismo no tiene anclajes en las clases sociales definidas por la socio-economía tradicional, es una actitud estructuralmente flotante y ambigua, mas emoción que inteligencia, semeja ser partidista, pero en la vía de los hechos su radicalismo aspira a borrar del mapa a los partidos mismos, aduciendo su fobia creciente e implacable en contra del gobierno de las élites. El populismo pretende realmente destruir la política partidista, para imponer la política de facciones, lo hace además utilizando los instrumentos institucionales de la democracia constitucional, para en último término torpedearla. Hoy, en Chihuahua tenemos un escenario claro de ese Manual del populista, este traza un espacio simbólico triangular en torno a tres actores y sus relaciones: el pueblo, la clase política y los populistas mismos. El primero de estos actores representa la “víctima inocente”; el segundo, “el canalla malicioso”, y el tercero, “el héroe redentor” …”
“…Hoy AMLO y su andamiaje útil denominado MoReNa (Movimiento de Regeneración Nacional), abanderados para la gubernatura de Chihuahua por Juan Carlos Loera, casi logran el encasillamiento de la perversa BOA (Bloque Opositor Amplio), ahí ya se asentó en la víspera inminente del 6 de Junio de este decisivo 2021, lo que se concretiza en las siglas ciertamente sinuosas del PRIANRD, el esquema se salva por la independencia y el no encuadramiento del partido MC (Movimiento Ciudadano), que se sobrevive a la jaula maniquea y simplista del populismo mexicano hoy encabezado por el espíritu faccioso y mesiánico de AMLO, decidiendo correr de manera autónoma la suerte de las votaciones de este próximo mes en la lucha por la gubernatura…”
“…En este contexto, los populistas intensificarán su adjetivación en contra de la “impureza fatal”, de la burda manipulación de las perversas élites, satanizando el valor de la negociación y el pluralismo constitucional. También se abundará desde este álgido momento y para todo el pavoroso ambiente conflictivo que se avecina para el país y el estado, la santificación monopólica del “pueblo”, entidad semántica conceptuada y construida por el populismo que la sustantiva incluyendo solamente a la gente “común y corriente”, en su lógica facciosa no se incluirá ni mucho menos a toda la gente, mucho menos a la estigmatizada clase política. El populismo cultiva el antisistemismo y degenera en la realidad en el antipartidismo, incluso la deriva hacia la destructiva antipolítica, hunde sus raíces en la primitiva reacción de los gobernados en contra de los gobernantes, con la suposición implícita de enorme valor ideológico para los populistas de que gobernar corrompe…”
“… ¿Qué le espera a Chihuahua en este acomodo al esquema populista del Manual de AMLO, con el agravante de la presencia de una candidata impugnada con la fuerza de un proceso legal de vinculación? Turbulencia, sin duda. ¿Hacia dónde volarán los votos el próximo 6 de Junio? Es incierto aún especular con claridad al respecto, es un hecho que con todo este raro batuque que exhibe hoy la disputa sucesoria en Chihuahua, al parecer en su generalidad lo que menos parece importar es lo fundamental para salvar a una democracia apaleada por el apetito goloso de poder del populista mayor y la galopante corrupción, es decir, la Ciudadanía. Tres fuerzas políticas están con nitidez en el tablero de la sucesión en Chihuahua: el populismo de AMLO, la corrupción del inefable PRIANRD y la interesante incertidumbre expectante de lo que representa y representará MC, hoy abanderado por Alfredo “El Caballo” Lozoya. Surge de inmediato la pregunta, ¿logrará realmente escapar MC de la polarización populista en la decisión del elector y la electora del 6 de Junio? ¿Derivará votos independientes a partir del potencial repudio ciudadano a los bloques de MoReNa y el PRIANRD?…”