El mundo del rock llora la pérdida de uno de sus íconos más legendarios: Ozzy Osbourne, el inconfundible «Príncipe de las Tinieblas», murió el pasado 22 de julio a los 76 años, dejando un legado monumental en la historia de la música y un vacío irreparable en su familia.
Por su parte, Kelly Osbourne compartió un video íntimo de su padre en casa, grabado apenas dos días antes de su muerte. En la grabación, Ozzy aparece sonriendo mientras disfruta un desayuno familiar con su hija menor y su nieto de dos años, Sidney. “Buenos días, papá”, le dice Kelly, a lo que él responde con afecto, mostrando un momento de ternura que conmovió a miles en Instagram.
Días después, Kelly rompió el silencio a través de sus historias de Instagram, en donde en un fondo negro escribió: «Perdí al mejor amigo que jamás tuve». Y es que es bien sabido que ambos mantenían una relación muy estrecha, muestra de ello es que poco antes de que el cantante de «Paranoid» muriera, pudo ser testigo del compromiso de Kelly con el músico Sid Wilson, de la banda Slipknot.
La propuesta tuvo lugar detrás del escenario durante el último concierto del artista, celebrado en Villa Park, Birmingham, ciudad natal del cantante y cuna de Black Sabbath. La imagen del momento le dio la vuelta al mundo debido a la reacción del músico, lo que ahora es atesorado por su familia.


