Una jueza del estado estadounidense Tennessee ordenó el domingo que Kilmar Ábrego García sea liberado de la cárcel mientras espera un juicio federal por presuntos cargos por el tráfico de personas, pero no se prevé que se le permita quedar en libertad.
La deportación errónea de Ábrego García, un salvadoreño que residía en Maryland, se convirtió en un punto álgido en la ofensiva del presidente Donald Trump contra la migración.
En su audiencia de detención el pasado 13 de junio, los fiscales indicaron que el Servicio de Migración y Control de Aduanas (ICE) lo detendría si fuera liberado por los cargos penales, y podría ser deportado antes de tener la oportunidad de ir a juicio.