La inflación se aceleró por tercera quincena al hilo en la primera mitad de diciembre para ubicarse en 4.46 por ciento anual, desde el 4.33 por ciento de la segunda quincena de noviembre, de acuerdo con el INEGI.
El dato se ubicó por encima del 4.34 por ciento anual estimado por analistas consultados por Citibanamex en su encuesta que se publicó hace un par de días, lo que sugiere una mayor resistencia de los precios.
Este rebote en la inflación ya estaba previsto por el mercado, debido a la alta base de comparación de este tramo de año, respecto a lo que se observó a finales del 2022.
En su comparación quincenal, el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) mostró un incremento de 0.52 por ciento, el más elevado para una primera quincena de diciembre desde el 2018, señaló el Instituto.
Andrés Abadia, de Pantheon Macroeconomics, destacó que en general, los datos del INPC confirman que las presiones subyacentes siguen disminuyendo, a pesar de las presiones generadas por las malas condiciones climáticas temporales que afectan a la no subyacente, como los agropecuarios.
“Esperamos que las condiciones se estabilicen pronto en el sector no subyacente, lo que, junto con el alivio de las presiones relacionadas con la demanda, el efecto retardado del repunte del peso mexicano en los últimos meses y el lastre de las tasas de interés altas, obligará a Banxico a adoptar un enfoque menos cauteloso”, indicó el economista en jefe para América Latina de Pantheon Macroeconomics.
El alivio para las autoridades monetarias es que la inflación subyacente se moderó a 5.19 por ciento anual en la primera mitad de diciembre, desde 5.30 por ciento anual del cierre de noviembre y mejor del 5.21 por ciento anual estimado.
Además, con esta moderación, la inflación subyacente ligó 21 quincenas a la baja y el dato de la primera mitad de diciembre es el más bajo desde la primera quincena de octubre del 2021.


