Un hombre de 40 años identificado como Hakan Aysal se tomó una selfie junto a su esposa embarazada, justo antes de empujarla para que ella cayera por un acantilado.
Aunque el asesinato ocurrió en junio de 2018 mientras la pareja estaba de vacaciones en Butterfly Valley, en la ciudad de Mugla, Turquía, el caso volvió a tomar notoriedad en fechas recientes.
De acuerdo con el medio The Sun, el individuo empujó a su esposa por el acantilado para causarle la muerte y poder cobrar un seguro de más de 40 mil euros que había contratado con anticipación.
Al sujeto no le importó quitarle la vida a su mujer al lanzarla por una altura de más de 300 metros, tampoco tomó en cuenta el hecho de que ella estaba embarazada de siete meses.
El hombre tomó la selfie y se aseguró de que no hubiera nadie cerca
En días recientes, según los reportes locales, debido al terrible impacto la mujer y el feto murieron instantáneamente tras concretarse la caída del acantilado de Turquía.
Las investigaciones de las autoridades permitieron determinar que lo ocurrido no se trató de un accidente, tal como lo quiso hacer creer Hakan Aysal.