La Fiscalía de Guatemala busca llevar ante la justicia al actual ministro de Defensa de Colombia, Iván Velásquez, tras acusarlo de supuestas acciones ilegales cuando fungió como jefe de una misión antimafias de las Naciones Unidas, mismo que ha generado un conflicto diplomático entre Bogotá y el país centroamericano.
Velásquez es señalado de presuntamente avalar de forma irregular, los acuerdos de «colaborador eficaz» (testigo protegido) de tres exdirectivos brasileños en el caso de sobornos de la constructora Odebrecht en Guatemala, según el jefe de la Fiscalía Especial Contra la Impunidad (FECI), Rafael Curruchiche. Él y la exfiscal general Thelma Aldana otorgaron en 2017 el «visto bueno» para suscribir los acuerdos de colaborador eficaz en medio de la investigación del caso que ha sacudido a varios países de América Latina.
La FECI «emprenderá las acciones legales correspondientes» para que Velásquez y otros involucrados en el caso «respondan por sus actos ilegales, arbitrarios y abusivos», al considerar que la negociación causó «un grave detrimento al Estado de Guatemala», afirmó, recalcando que tenían pleno conocimiento de las oscuras y corruptas negociaciones que se estaban realizando» con la firma brasileña.
Velázquez dirigío desde 2013 y hasta su cierre en 2019 la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (CICIG), un organismo adscrito a la ONU que, junto al Ministerio Público, revelaron varios escándalos de corrupción. Entre ellos, la estructura de defraudación en aduanas del expresidente Otto Pérez Molina, mismo que fue condenado a 16 años de prisión en diciembre pasado. Níega las acusaciones.