El secretario de Justicia de Estados Unidos William Barr declaró el martes que su departamento no ha descubierto evidencia alguna de un fraude que pueda cambiar el resultado de las elecciones.
Los comentarios marcan un agudo contraste con las denuncias y acusaciones del presidente Donald Trump, quien se niega a aceptar su derrota ante el demócrata Joe Biden.
En entrevista con The Associated Press, Barr divulgó que fiscales y agentes del FBI han estado siguiendo pistas y atendiendo a denuncias que han recibido, pero hasta ahora no han detectado ninguna irregularidad que pueda cambiar el resultado de la votación.
“Hasta la fecha, no hemos visto fraude de una magnitud que pueda llevar a un diferente resultado electoral”, indicó Barr en la entrevista.
Los comentarios son particularmente importantes ya que Barr ha sido uno de los más estrechos aliados del presidente saliente. Antes de las elecciones, mencionó repetidamente la posibilidad de que los sufragios depositados por correo eran vulnerables al fraude, en momentos en que una parte de la población optó por votar de esa manera a fin de evitar la presencia física en los centros de votación durante la pandemia.