El Departamento de Justicia de Estados Unidos preparan acciones legales para que evadir aranceles sea un delito penal.
Los fiscales federales están sentando las bases para imputar a empresas e individuos que intenten evadir la tarifa, según un reporte de la agencia Bloomberg.
Funcionarios de aduanas de la Unión Americana buscan frustrar los intentos de evadir aranceles mediante estrategias como cambiar el país de origen de las importaciones o clasificar erróneamente las mercancías en los formularios.
Sin embargo, históricamente, estos problemas se han resuelto mediante multas o acuerdos civiles, y rara vez mediante un proceso penal.
El Departamento de Justicia afirma que está incorporando personal a una nueva unidad para centrarse en el fraude comercial y otros delitos corporativos.


