El presidente de Colombia, Iván Duque, hizo esta madrugada una visita relámpago a la ciudad de Cali, epicentro de las protestas que vive el país desde el 28 de abril, y permaneció allí cuatro horas para encabezar un consejo de seguridad que abordó la situación en esa urbe.
Duque, que el mismo domingo por la noche dijo que «por prudencia» decidió «no hacer en este momento presencia (en Cali)», viajó sin anuncio previo a las 23.30 horas (4.30 GMT del lunes) para reunirse con los miembros de su Gobierno que allí se encuentran, la gobernadora del departamento del Valle del Cauca, Clara Luz Roldán, y con el alcalde de la ciudad, Jorge Iván Ospina.
Sin haberse reunido con ninguno de los manifestantes que se encuentran en Cali o haber visitado las calles, el mandatario regresó hoy a las 4.00 hora local (9.00 GMT) a Bogotá, donde tiene programada una reunión con sindicatos y organizaciones sociales organizadoras de la huelga del 28 de abril, agrupadas en el Comité Nacional del Paro.
El mandatario consideró que su visita quiere dejar claro «que nuestra función es que los ciudadanos de esta ciudad y de este departamento puedan estar mañana en tranquilidad, puedan recuperar su tranquilidad».