Dirige Hugo Terán mensaje en el natalicio de Benito Juárez

Saludo a Ciudadanos, miembros de la masonería universal y autoridades de los diferentes
órdenes de gobierno.

VV∴HH∴ Dignatarios de las diferentes Grandes Logias qué nos acompañan en el
presídium

Presidente municipal, Cruz Pérez Cuéllar.

Reciban todos el saludo siempre fraterno del V∴ H∴ Cuauhtémoc Plascencia Albiter, Muy
Respetable Gran Maestro de la Muy Respetable Gran Logia Valle de México.

Se preguntaba el patricio de la nación al reflexionar sobre la suerte de tantos hombres ante
la inutilidad del diálogo, la consigna sorda y la lucha fratricida por retener la autoridad y el
mando.

¿Qué hicimos con nuestros “padres fundadores” y hombres ilustres?
Solo piense un momento en nuestra historia de Hidalgo hasta Villa pasando por Allende,
Morelos y tantos hombres notables como Zapata, Carranza o Flores Magon.

¡TODOS ASESINADOS!

En la actualidad el escenario sigue siendo cruento, solo que en vez de magnicidios mueren
conciudadanos en manos del crimen organizado, estudiantes, mujeres y periodistas.

Benito Pablo Juárez García.

Para nosotros el hombre ilustre, visionario y justo; el mejor presidente de la República.
Muchos otros podrán disentir en tal afirmación, pero lo que es un hecho es que el I∴H∴
Benito Juárez nos une cada 21 de marzo alrededor de sendos monumentos en toda la
geografía nacional para rendir homenaje a su memoria y a su obra.

Juárez fue masón, porque vio en la masonería la caridad, la fraternidad y el mutuo auxilio;
porque encontró que su exclusivo fin es el de la felicidad del hombre por medio de la virtud, y que ella no atacaba a ninguna religión, sino que declaraba la libertad de cultos; porque, en resumen, comprendió que ser masón equivale a ser liberal.

 

La masonería no ha llegado a su ocaso, sigue activa, expectante y observando los grandes
cambios políticos y económicos de México y rechazando de facto, toda muestra de
manipulación religiosa y política.

El masón ilustrado comprende que la masonería es una y universal como su enseñanza,
aun cuando los hombres con poder, por sus propios intereses, directa o indirectamente, la
fragmenten.

Juárez lo preveía con precisión desde una perspectiva macrosocial cuando decía:
«El pueblo que quiere ser libre lo será. Hidalgo enseñó que el poder de los
reyes es demasiado débil cuando gobiernan contra la voluntad de los
pueblos.»

Finalmente, no podemos dejar de lado su máxima recomendación a los gobernantes:
«No se puede gobernar a base de impulsos de una voluntad caprichosa, sino
con sujeción a las leyes. No se pueden improvisar fortunas, ni entregarse al
ocio y a la disipación, sino consagrarse asiduamente al trabajo, disponiéndose
a vivir, en la honrada medianía que proporciona la retribución que la ley les
señala.»

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