La crisis climática amenaza los medios de vida y la atención sanitaria de 41 millones de personas en zonas costeras de baja altitud en Latinoamérica y el Caribe, según un nuevo estudio del Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA).
El informe, para el que se usaron imágenes por satélite, datos geoespaciales y estimaciones de población, establece que estas bajas comunidades litorales de la región están más expuestas a riesgos como la sequía, la desertificación, huracanes o tormentas.
“Los fenómenos meteorológicos extremos suelen traer como consecuencia inundaciones generalizadas que destruyen hogares, empresas y servicios esenciales, además de la atención sanitaria”, añade el documento.
Los datos se presentaron en la cuarta Conferencia de Pequeños Estados Insulares en Desarrollo (PEID4), que se celebra en Antigua y Barbuda hasta el jueves, donde UNFPA está pidiendo principalmente a los países participantes mayores inversiones para reducir las desigualdades de su población y una mejor gestión de los recursos hídricos. Mujeres y niñas, las más afect