China anunció el lunes la desactivación de la principal aplicación de control de los desplazamientos en el marco de su política contra el covid y que se utilizaba para comprobar si la gente había transitado por una zona afectada por el virus.
El anuncio coincide con el gran aumento del número de casos a una escala difícil de evaluar porque las pruebas PCR ya no son obligatorias y las personas no suelen informar si sus autotest dan positivo.
La aplicación, llamada Mapa de Desplazamientos, controlaba los movimientos del usuario a partir de datos telefónicos y mostraba las ciudades que había visitado en los últimos siete días. En función de esa información podía acceder o no a un hotel, un edificio o un centro comercial.