Los 200 casos de viruela del mono registrados en las últimas semanas fuera de los países donde suele circular podrían ser la «punta del iceberg», advirtió el viernes la Organización Mundial de la Salud (OMS), aunque pidió no entrar en «pánico».
«No sabemos si solo estamos viendo la punta del iceberg», reconoció Sylvie Briand, jefa de preparación y prevención de epidemias y pandemias de la OMS, durante una sesión informativa.
Los expertos tratan ahora de determinar las causas de esta «situación inusual», añadió.
Las investigaciones preliminares no parecen indicar que el virus haya cambiado o mutado y Briand cree que es posible detener la propagación.