Rusia afirmó este domingo haber destruido la víspera infraestructuras militares en el puerto de Odesa (suroeste), una zona vital para la exportación de granos ucranianos, lo que provocó la indignación de Ucrania y de sus aliados.
El presidente ucraniano Volodimir Zelenski calificó los ataques con misiles sobre el puerto de Odesa de «barbarie rusa», un día después de la firma en Estambul (Turquía) de un acuerdo entre ambos países para desbloquear las exportaciones de cereales.
Turquía, que medió en el acuerdo, aseguró el sábado haber recibido garantías de que Rusia no tenía «absolutamente nada que ver con el ataque» con misiles de crucero, según el ministro turco de Defensa, Hulusi Akar.
Pero la portavoz de la diplomacia rusa se retractó este domingo al afirmar que los misiles destruyeron una «lancha rápida militar» ucraniana.