El Clásico Joven atrajo las miradas de toda la Liga MX. El partido que definiría a los clasificados directos a la liguilla se jugó en el Estadio Azteca, terminando con un empate sin anotaciones entre América y Cruz Azul (0-0), mismo que manda a las Águilas directo a la liguilla y La Máquina deberá jugar la fase de repechaje.
La tensión y el nerviosismo se respiraban en Santa Úrsula, en la cancha se notaba que nadie regalaría ni un centímetro, lo que llevó a que por momentos el juego fuera friccionado, con patadas, roces y tarjetas amarillas para ambos bandos. De futbol y llegadas, muy poco, por lo que se fueron al descanso sin goles.
El complemento era a matar o morir, sobre todo para un Cruz Azul que la igualada no le servía de nada, por lo que tendrían que asumir una postura más agresiva para llevarse tres unidades que los catapultaran al tercer lugar de la clasificación general.
En el trámite, América jugaba más en territorio azul e incluso, tuvo la más peligrosa en un tiro de esquina donde Pedro Aquino remató con la cabeza y puso en el travesaño. En el rebote, Sebastián Jurado se revolvió para evitar un contrarremate que le diera la ventaja a los azulcremas.
Del otro lado, Cruz Azul respondió con Uriel Antuna, quien se escapó tras un error en la salida americanista, intentó picarle la pelota a Guillermo Ochoa, pero el arquero estiró los brazos y contuvo el balón para mantener todo igualado.
Ya en tiempo de compensación, La Máquina pudo abrir el marcador con un remate de tijera de Cristian Tabó que se fue a apenas desviado, sin embargo, América también pudo quedarse con los tres puntos, pero el remate con la cabeza de Bruno Valdez se impactó en la base del poste, sentenciando el 0-0 definitivo.