El expresidente ruso Dmitri Medvedev acusó este domingo a Alemania de librar una «guerra híbrida» contra Rusia, justificando el cese de los suministros de gas a Berlín por su comportamiento «inamistoso» en medio del conflicto de Ucrania.
Las declaraciones se producen en un momento en que las relaciones entre Alemania y Rusia, ya tensas por el conflicto en Ucrania, se complicaron aún más después de que Moscú suspendiera el suministro de gas a Berlín a través del gasoducto Nord Stream.
El canciller alemán Olaf Scholz afirmó que ‘Rusia ya no es un proveedor de energía fiable’. En primer lugar, Alemania es un país inamistoso, en segundo lugar ha impuesto sanciones contra toda la economía rusa (…) y está entregando armas letales a Ucrania», declaró Medvedev en un mensaje en Telegram.