La Agencia Europea del Medicamento (EMA) concluyó este viernes una investigación de varios casos de hinchazón facial tras la vacunación con Pfizer/BioNTech en personas con antecedentes de tratamientos de rellenos dérmicos y consideró que existe “al menos una posibilidad razonable” de que sea un efecto secundario de la vacuna.
Según las conclusiones alcanzadas por el comité de seguridad (PRAC), el hinchazón facial en personas con antecedentes de inyecciones con rellenos dérmicos debe incluirse en el prospecto como efecto secundario posible de la vacuna del covid-19 de Pfizer, aunque mantuvo que el balance entre beneficio y riesgo del fármaco sigue siendo positivo y “permanece sin cambios”.
Las campañas de vacunación masiva han sacado a la luz que varias personas vacunadas con Comirnaty, nombre comercial del preparado, desarrollaron esta reacción facial, según se refleja en todas las evidencias disponibles y los detalles que acompañan a los casos notificados en la base de datos europeos para presuntos efectos secundarios, EudraVigilance.
Este no era uno de los efectos adversos de Pfizer detectados durante los ensayos clínicos en voluntarios a los que se inyectó el preparado, lo que se hizo solo en un número determinado de personas.