Al menos 30 personas y 90 terminaron lesionadas murieron el miércoles en una estampida en Prayagraj, una ciudad en el norte de la India que acoge el peregrinaje hinduista del Kumbh Mela, con una afluencia prevista de 400 millones de fieles. Este gran evento religioso, presentado como la mayor concentración humana del planeta, congrega cada doce años a multitudes de fieles hinduistas que se bañan en la confluencia de dos ríos sagrados para expiar sus pecados.
«Treinta fieles fallecieron, lamentablemente», indicó en conferencia de prensa el oficial de policía Vaibhav Krishna. «Noventa heridos fueron llevados al hospital», agregó.
Ni las autoridades locales ni las fuerzas de seguridad emitieron por ahora un balance completo de la estampida. En el lugar del accidente, entre un cúmulo de ropas, zapatos y otras pertenencias abandonadas, miembros de los equipos de rescate y peregrinos evacuaban a las víctimas. A un kilómetro de allí, junto a una enorme tienda habilitada como centro de atención sanitaria durante el festival, decenas de familiares esperaban impacientes noticias de las víctimas.