El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, sugirió ayer convocar nuevas elecciones en Venezuela como una medida para salir de la crisis poselectoral que atraviesa el país, iniciativa que fue respaldada después por sus pares de Colombia, Gustavo Petro, y Estados Unidos, Joe Biden, aunque la Casa Blanca posteriormente corrigió y dijo que se refirió a que las autoridades venezolanas deben aclarar los resultados y no repetir los comicios.
El presidente venezolano, Nicolás Maduro, tomó distancia de la propuesta de Lula, que fue rechazada por la líder opositora, María Corina Machado.
Maduro «podría intentar hacer un llamado al pueblo de Venezuela, tal vez incluso convocar un programa electoral, establecer criterios para la participación de todos los candidatos (…) y dejar que observadores de todo el mundo vayan a ver las elecciones, afirmó en una entrevista Lula, y señaló que aún no reconoció los resultados.
El mandatario brasileño agregó que un gobierno de coalición podría ser otra posible solución para Venezuela tras los comicios presidenciales del 28 de julio, en las que el Consejo Nacional Electoral proclamó vencedor a Maduro, y en las que la oposición alega, sin pruebas, que fueron fraudulentas.
«Si (Maduro) tiene sentido común podría planteárselo al pueblo, tal vez convocando nuevas elecciones con un comité electoral apartidario, señaló Lula en una entrevista radial.