Kate del Castillo sigue luchando para que el gobierno mexicano le otorgue una reparación integral de daños, como resultado de los tres años que permaneció alejada del país por lo que calificó en su momento como una persecución por parte del Estado.
La actriz de “Ingobernable” y “La reina del sur” abandonó México luego de que fue señalada por las autoridades del sexenio de Enrique Peña Nieto, tras un encuentro que ella tuvo con el narcotraficante Joaquín “El Chapo” Guzmán, de quien pretendía hacer una película.
En ese encuentro, efectuado en 2015, estuvo acompañada por el actor estadounidense Sean Penn. Ella salió del país ante la poca confianza que le inspiraban las autoridades, las cuales, dijo, montaron un juicio mediático en su contra: “El Estado mexicano me persiguió y me atacó por mi condición de mujer y figura pública y por ser una crítica del gobierno (de Peña Nieto) o por entrevistar al hombre más buscado del mundo o por exhibir a las autoridades que permitieron su fuga”, dijo cuando regresó a México, en diciembre de 2018, con la apertura del gobierno de Andrés Manuel López Obrador.