Son Heung-min, delantero surcoreano y estrella del Tottenham, pidió perdón por su implicación en un altercado durante la Copa de Asia en Qatar con su compañero Lee Kang-in, en el que resultó herido en una mano la víspera de la semifinal perdida contra Jordania (2-0).
«Sinceramente, siento haber provocado problemas y trabajaré aún más duro para hacer crecer a la selección», escribió el capitán surcoreano en su cuenta de Instagram.
«Kang-in ha pasado por momentos muy difíciles tras el incidente. Por favor, perdónenlo», añadió en referencia a su joven compañero y jugador del Paris SG, aunque se reafirmó en su manera de actuar: «Si se reprodujese la misma situación, reaccionaría igual, porque es uno de los deberes del capitán».