A pesar de que ella comenzó en la industria cinematográfica a la edad de 12 años, Natalie Portman advierte sobre los graves peligros de ser un niño actor y, por lo tanto, dice que no animaría a ningún joven a dedicarse a la actuación hasta que sea mayor.
La ganadora del Oscar y estrella de Cisne Negro, de 42 años, protagonizó la película de acción El Perfecto Asesino, en 1994, cuando tenía precisamente 12 años y admite que este suceso sólo fue “por suerte”, pero que gracias a que sus papás eran “sobreprotectores” no fue perjudicada por la toxicidad que se vive en el medio.
“No alentaría a los jóvenes a involucrarse en esto. No me refiero a nunca; me refiero a cuando son niños”, dijo la actriz en entrevista con Variety. “Siento que fue casi un accidente de suerte que no sufriera daño, además de tener unos padres maravillosos y sobreprotectores”, especificó.
Natalie Portman, quien en su trayectoria profesional ha actuado tanto en la saga de Star Wars como el clásico drama Closer y recientemente protagonizó Thor: Love and Thunder, dijo tener la esperanza de que la industria esté cuidando mejor a los artistas jóvenes en estos días.