Finlandia endureció este miércoles sus estrictas restricciones de viaje al prohibir la entrada al país de todos los viajeros procedentes del área Schengen que no realicen trabajos considerados esenciales, una medida que estará en vigor hasta el 25 de febrero.
El objetivo del Gobierno finlandés es reducir aún más el tráfico transfronterizo para evitar la propagación de las nuevas variantes del virus Sars-CoV-2, causante de la pandemia de Covid-19, de las que se han detectado ya más de un centenar de contagios en el país nórdico.
Hasta ahora estaba permitida la llegada de extranjeros por motivos laborales, pero en adelante sólo podrán entrar en Finlandia quienes realicen «un trabajo importante para el funcionamiento de la sociedad o para la seguridad del suministro», según explicó el Ejecutivo en un comunicado.
Estos trabajadores deberán presentar en el control fronterizo un formulario expedido por su empresa que justifique que la labor que vienen a hacer es esencial y que debe realizarse sin demora.
La lista de trabajadores considerados esenciales incluye, entre otros, al personal sanitario, diplomáticos, periodistas extranjeros, transportistas y empleados de organizaciones internacionales.
Las nuevas restricciones no afectarán a los ciudadanos finlandeses ni a los extranjeros residentes en Finlandia, a quienes la Constitución reconoce el derecho a entrar y salir del país libremente.
También están exentos los familiares cercanos, los estudiantes extranjeros, los solicitantes de asilo y los miembros de varios «grupos especiales» que lleguen con una invitación, entre ellos los profesionales del deporte, la cultura y los negocios.
Los más afectados por las nuevas restricciones serán los cerca de 30 mil obreros estonios que trabajan en Finlandia, principalmente en la construcción, quienes no podrán volver a su país los fines de semana durante al menos un mes si quieren mantener sus puestos de trabajo.
Del mismo modo, los residentes de las zonas fronterizas con Suecia y Noruega, que hasta ahora tenían un estatus especial, ya no podrán entrar en territorio finlandés para trabajar si no cumplen una labor esencial.
Finlandia es actualmente el tercer país europeo con menor incidencia de Covid-19, con 77,3 casos por 100 mil habitantes en las últimas dos semanas, sólo por detrás de Islandia, que acumula 23,5, y de Grecia, con 69,1.