Las imágenes de Wuhan, foco inicial de la pandemia del coronavirus, al año del inicio de su confinamiento contrastan con aquellos dos meses de encierro en los que esta ciudad china quedó completamente paralizada, con la “línea de combate” en los hospitales, como recuerda el filme 76 days (76 días).
“Cada vez que tenemos una pandemia, cuando acaba, simplemente seguimos adelante como si nada hubiera ocurrido, al igual que con la crisis económica. Mi trabajo es seguir recordándole a la gente, que no se olviden de esto”, explica Hao Wu en una entrevista con Efe al hablar de su filme, cuya autoría comparte con otros dos directores.
Su primer instinto, junto a Weixi Chen y un tercer colega, que permanece en el anonimato, era “investigar”, pero no lograron “encontrar nada que no hubiera sido ya descubierto o debatido”.
Por eso decidieron centrarse en aquellos aspectos que hacen “tan único” su material, un enfoque “muy empático” y con mucho respeto, en el que los dos codirectores, desde Wuhan, trataron de captar “los pequeños detalles humanos en la línea de combate, en la zona de guerra”, es decir, en los hospitales, indica.