“Ana es una ejecutiva con un puesto muy importante y está rodeada de hombres. A lo largo de la historia se ha apoyado más a los hombres que a las mujeres, incluso hay todo un movimiento en Hollywood de que los actores ganan más que las actrices. Es algo que pasa en todo el mundo y eso ha generado un movimiento femenino”, comenta Ludwika.
Pese al panorama desfavorecedor para las mujeres, Paleta busca una igualdad entre ambos géneros.
“Esta serie habla del empoderamiento femenino y de cómo las mujeres, si nos damos la mano en lugar de pisarnos, podemos hacer cosas increíbles”.
Como parte de este movimiento, la actriz también desea que entre su propio género cada vez exista más solidaridad, compañerismo y empatía.
“Hay que aprender a reconciliarnos en nuestras diferencias, veo que últimamente hay mucha polarización y violencia hacia el que no piensa como tú, cuando en realidad podemos aprender mucho escuchando a los que tienen opiniones diferentes; la serie plantea cómo dos mujeres se pueden llevar bien entre sí”.