Muchas veces ayudadas por los seres humanos, algunas especies logran pasar de un continente a otro y generan desastres ecológicos difíciles de revertir, como fue el caso de los castores en Tierra del Fuego o de la trucha arcoíris en los lagos de la Patagonia.
Ahora, profesionales del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) emitieron una alerta tras detectar la presencia de una peligrosa nueva especie invasora: el caracol gigante africano (Achatina fulica).
Considerado como una de las 100 plagas agrícolas más perjudiciales del mundo, según el mismo organismo, el caracol africano puede ocasionar daños sobre la agricultura y la fauna de caracoles nativos, además de transmitir parásitos perjudiciales para las personas.
El nuevo hallazgo de caracoles gigantes ocurrió en el km 9 de la calle San Luis, en la ciudad de Eldorado, Misiones, tras la denuncia de un vecino. Los técnicos del organismo capturaron 15 ejemplares de este molusco terrestre con el objetivo de prevenir su dispersión, según informaron en el sitio oficial del Estado Nacional.
De acuerdo con los especialistas, la primera aparición de un caracol africano ocurrió en la misma provincia, en este caso en Puerto Iguazú, en diciembre de 2010. Años más tarde, en 2019, también se reportó su presencia en el municipio misionero de Wanda.