La actuación de Sergio Pérez en el Gran Premio de Australia le valió al piloto mexicano su primer podio de la temporada, un resultado que parecía llegar antes, pero la mala suerte se lo impidió tanto en Baréin como en Arabia Saudita.
El segundo puesto de Melbourne colocó a Checo en el cuarto puesto del campeonato de pilotos con 30 puntos, dos por delante del siete veces campeón del mundo Lewis Hamilton y cinco sobre el actual monarca Max Verstappen, compañero de equipo del mexicano en Red Bull Racing. Delante de él está Carlos Sainz a sólo tres puntos de alcance.
Es la primera ocasión en la Fórmula 1 en que el tapatío, después de tres carreras, figura en las cuatro primeras posiciones del campeonato como consecuencia de un cuarto lugar en Arabia Saudita, el podio en Melbourne y un retiro en Baréin. Sus mejores resultados en las tres primeras carreras del año antes de 2022 se dieron en 2020, su última campaña en Racing Point, cuando logró dos sextos lugares y un séptimo puesto.
Más allá de los números, Sergio Pérez ha demostrado una evolución importante en su segunda campaña en Red Bull Racing.
UN AÑO DE EXPERIENCIA PAGA FRUTOS
Cuando Sergio Pérez arribó a Red Bull en 2021, sólo tuvo día y medio de adaptación al equipo y al coche, el RB16B.
El tapatío batalló durante la primera mitad del año pasado con el coche, pero una vez adaptado al vehículo y a la estructura de Red Bull, los resultados se dieron.
Para muestra están los tres podios consecutivos en Turquía, Estados Unidos y México, además de las peleas por el podio en las últimas cuatro carreras, sin olvidar la forma en que retrasó el avance de Lewis Hamilton en la gran final en Abu Dabi.
Asimismo, los ingenieros del equipo austriaco tomaron en consideración las cualidades y requerimientos de conducción del mexicano. El RB18, modelo de este año, resulta cómodo para él, como dijo Helmut Marko, asesor de Red Bull, en declaraciones a la cadena RTL.
