El exdirectivo de Nissan, Greg Kelly, recibió una condena de seis meses de cárcel en suspensión por haber ayudado a esconder la fortuna del antiguo presidente ejecutivo de la automotriz, Carlos Ghosn.
El estadunidense de 65 años, antiguo responsable de asuntos jurídicos de Nissan, fue detenido en noviembre de 2018 junto a Ghosn, entonces al frente de la alianza automovilística Renault-Nissan-Mitsubishi.
Aunque al comienzo su papel en el caso era totalmente secundario, la rocambolesca huida del empresario a Líbano un año después lo dejó en primera línea de fuego.