Las amenazas medioambientales que se intensifican constituyen «el desafío más importante» para el ejercicio de los derechos humanos, afirmó este lunes la Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet.
A pocas semanas de la conferencia mundial sobre el clima COP26 de principios de noviembre, Bachelet reclamó una «acción climática más ambiciosa» frente al calentamiento global, la contaminación y la perdida de la biodiversidad.
Bachelet subrayó que esta «triple crisis planetaria», en gran medida provocada por la acción del hombre, ya tiene un impacto amplio y directo sobre toda una serie de derechos humanos, como «los derechos a una alimentación adecuada, al agua, a la educación, a la vivienda, a la salud, al desarrollo e incluso a la vida».
La contaminación «es la causa de una de cada seis muertes prematuras», destacó.
Bachelet enumeró una lista de crisis ambientales como, entre otras, la hambruna en Madagascar, la desertificación en el Sahel, la escasez de recursos hídricos en Oriente Medio, los incendios en Siberia y California y las inundaciones en China y Alemania.