Autoridades de California comenzaron a ir casa por casa pidiendo a los residentes que desalojen ante el avance de los incendios, reportó el departamento de bomberos.
Las autoridades también ordenaron evacuar algunas zonas del pueblo de Lower Lake, incluyendo dos escuelas y un campo de casas móviles, debido a la erupción de nuevas llamas.
Un nuevo incendio forestal comenzó el miércoles a las afueras de la capital de California el fin de semana, y había arrasado más de 215 kilómetros cuadrados hasta este miércoles.
Más al norte, el enorme incendio Dixie continúa ardiendo. Ha calcinado más de dos mil 400 kilómetros cuadrados desde que comenzó en julio, convirtiéndose en el segundo peor de la historia de California.
La escena se repite: enormes columnas de fuego consumiendo árboles al borde de una carretera, mientras los bomberos tratan de establecer líneas de contención.
En el pueblo de Janesville, autos quemados, reducidos a carcachas, están estacionados en la aún humeante tierra.