El exlíder de la secta NXIVM recibió el martes la orden de pagar 3 millones y medio de dólares a 21 víctimas de una red de tráfico sexual, una suma que incluye el costo de eliminar quirúrgicamente las cicatrices resultantes de los rituales realizados por una hermandad secreta.
Las marcas de las iniciales de Keith Reniere eran para simbolizar la condición de las mujeres como esclavas sexuales del gurú de la autoayuda, quien alguna vez tuvo seguidores a nivel internacional. El juez de un tribunal federal de Brooklyn también ordenó a Raniere devolver ‘bienes colaterales’ —fotografías de desnudos y otro material potencialmente embarazoso— que era utilizado para extorsionar y manipular a las víctimas.
Raniere, quien compareció por video desde una prisión en Arizona, comentó al juez que estaba desconcertado por la orden de restitución.